domingo, 20 de marzo de 2011

recuerdo

Fui un rato detrás de ti y hasta creo que te llamé, pero me veía ridícula, casi tan ridícula y tan humillada como cuando José Manuel me dijo unos días antes que seguía queriéndome y que no me olvidaría nunca, pero que iba a dejarme. Si tú vas a dejarme alguna vez por favor no me digas nada de eso, no digas que es mejor para los dos y que has sufrido mucho hasta decidirte, o que no me olvidarás, o que a pesar de todo a los dos nos quedará un buen recuerdo, di simplemente que te vas y no expliques nada ni tardes más de dos minutos en salir por la puerta, no me mires con cara de compasión ni de tortura ni de sacrificio, vete y no vuelvas, líate con otra o hazte fraile o pégate un tiro pero no aparezcas nunca más delante de mí.

El jinete polaco, Antonio Muñoz Molina

No hay comentarios:

Publicar un comentario