jueves, 5 de septiembre de 2013

Deadlight (PC) -Análisis-

Si hay una cosa por la que deben destacar los juegos indies ha de ser por la frescura, por la innovación en la oferta, ya que a nadie se le escapa que no se puede competir contra estudios que pueden contratar lo mejor de lo mejor en cada uno de los aspectos técnicos del juego. Lo que deben hacer es aprovechar esa reticencia de los productores a invertir en cosas diferentes que hace que todos sus triples A sean clónicos maravillosos y perfectos, pero que acaban aburriendo por mera repetición. Uno de esos juegos que prometen algo diferente es Deadlight. Vamos a ver qué tal ha salido.
 

Deadlight es un juego que se desarrolla tras el enésimo apocalipsis zombie. El protagonista, acompañado de varios supervivientes más, se ve separado del grupo y debe continuar la búsqueda de su familia en solitario atravesando una ciudad devastada por la situación. La palabra clave aquí es atravesar ya que la principal innovación que nos presenta este título es una jugabilidad 2D, avanzando hacia la derecha como toda la vida de Dios, pero con unos escenarios muy cuidados en donde iremos avanzando atravesando edificios, carreteras y diversas localizaciones que no pienso espoilearos. Lo interesante de esto, de nuevo, es ver cómo parece que se ha cogido una ciudad y, mientras en otros títulos irías por el camino marcado, la carretera, la calle, etc, aquí se está atravesando continuamente estos elementos. Hazle un tajo a una ciudad de un punto a otro y por esa línea recta es por donde vas a ir, sin rodeos, y le queda bastante bien. Eso sí, no busquéis caminos alternativos o elecciones, no hay nada de eso.


Dentro de este escenario se desarrolla una mecánica de puzzles sencillos, con partes de plataformas o habilidad y momentos muy puntuales de agobio por la cercanía de zombies. Existen además numerosos ítems como páginas del diario, máquinas recreativas u objetos secretos a encontrar; todo esto dentro de una historia que trata de mostrarte, mediante el diario y diversos flashbacks, qué ha pasado con el mundo y con la familia del protagonista. El apartado gráfico no aporta nada especial, igual que el musical. Es cierto que hay algunos momentos en donde lo que ves resulta realmente hermoso, pero tampoco es algo realmente memorable. La jugabilidad es demasiado estricta, con animaciones que no se concatenan bien a veces y que hacen que mueras porque no te ha respondido bien y esto es un pecado capital en los juegos. Y estos son todos los elementos del juego. Poco más hay que decir sobre lo que hay.


Con todo esto dicho anteriormente se podría decir que tenemos elementos suficientes para un buen juego, pero desgraciadamente hay demasiados lastres. Por un lado la innovación inicial, la que se vende y te entra por los ojos se difumina en poco tiempo por dos razones: primero esa transversalidad no dura demasiado, de hecho se consigue en partes del primer y tercer actos, pero está completamente ausente en el segundo; por otro, nos trata de contar el enésimo apocalipsis zombie del cual estamos (yo al menos) más que hartos. Es una historia con zombies, militares, zonas de seguridad, mensajes de radio, chicos solitarios por los tejados y nada más. El título intenta sorprendernos con los flashbacks, con la historia oculta del protagonista, pero la verdad que a las dos horas, si no la sospechas es que no estás prestando atención, lo cual tampoco es muy raro ya que no hay mucho más que hacer más que superar los obstáculos para terminar el juego cuanto antes. No apetece ni leer el diario ni rescatar a tu familia, como mucho encontrar los secretillos y poco más.


Deadlight en su conjunto es una experiencia decepcionante. Es barato, dura unas 6 horas consiguiendo todo y se podría decir que es un producto que alcanza los mínimos de un indie pero no es así. No engancha, no te anima a continuar en el nivel nuevo de dificultad o a leer el diario, e incluso una vez superada la impresión inicial de la transversalidad, aburre, y mucho. No os engaño si os digo que lo he terminado para poder desinstalarlo y lo he hecho en cuanto tuve ocasión, y que ha estado meses a medio jugar. Hay que reconocer que una vez me puse en serio con él para acabarlo la experiencia tampoco estuvo tan tan mal, pero en su conjunto no es un gran juego. Por eso, para que os hagáis una idea, no me arrepiento de comprarlo jugarlo, sino de haberlo recomendado. Este es un producto que no aporta nada y que, sinceramente, no recomiendo a nadie. Con un poco de suerte servirá como aprendizaje para estos chicos y logrará que saquen cosas mucho mejores. Entonces sí que venderán más títulos de Deadlight. Yo sinceramente espero que sea así. Hasta entonces, la nota no puede ser mayor.

Puntuación: 3

No hay comentarios:

Publicar un comentario